Veamos el caso de un coche que embiste contra patrullas de policía intentando escapar acabando la cosa en un tiroteo. El coche era perseguido y fue acorralado en una calle. Colisiona con un auto patrulla policial y tiene que detenerse. Por detrás llega otra patrulla. El sospechoso permanece dentro del vehículo. Los agentes se mueven alrededor del vehículo.
Al principio de la grabación parece que ya está todo resuelto. El conductor del vehículo detenido estará dentro aturdido por la colisión con la patrulla. Pero de repente, todo empieza otra vez. El sospechoso da marcha atrás. Después, adelante. Y otra vez marcha atrás arrollando al coche de la policía.
Es una escena como las que en ocasiones se ven en las películas sólo que en esta ocasión es de verdad. El sospechoso logra romper el cerco policial pero con el resultado de que es acribillado a tiros.
De todos modos resulta algo raro que los agentes que detienen el vehículo no tomen acciones rápidamente con el conductor, para sacarlo afuera y controlarlo. Quizás pensaron que estaba fuera de combate o no se percataron de lo peligroso que era. Pero cuando ven que les ha destrozado un vehículo patrulla y se escapa no dudan de disparar a mansalva contra él. Lo cosieron a tiros.
Y ya que estamos con colisiones vamos a ver otro vídeo viral donde hay un accidente en una autopista. Los coches que vienen por el carril en dirección contraria se despistan mirando el desastre que hay al otro lado y algunos son víctimas de alcances con graves consecuencias.
Es muy frecuente en ese tipo de situaciones que la vista se vaya hacia el lateral donde se ha producido un siniestro. Esos breves segundos de echar un vistazo puede dar lugar a su vez a nuevos accidentes sobre todo en autopistas y cuando hay abundante tráfico.
Se sabe que uno de debe apartar la vista de la carretera. Incluso está penalizado girar la cabeza hacia un lateral más de 45 grados. Pero es casi inevitable que la mirada se vaya hacia un siniestro que está en un lateral o al otro lado de la autopista. Pero las consecuencias pueden ser nefastas. Aunque claro, tú puedes ser prudente pero si no lo es el que viene detrás, te lleva por delante.
Total que en un momento se arma una ensalada de vehículos golpeados en cadena. Uno de los policías que estaban atendiendo en el accidente inicial no deja de gritar antes el espectáculo de colisiones que empieza a haber.
Mientras tanto:
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