Es cada vez más habitual encontrar farolas cubiertas de todo tipo de anuncios donde se ofertan todo tipo de servicios. Puede uno encontrar servicios de lo más variopinto: pintores, albañiles, electricistas, fontaneros, limpiadores, cristaleros, cerrajeros, adivinadores del futuro, en fin, casi lo que uno pueda imaginar.
Todos los días se contratan miles de servicios merced a éste tipo de anuncios. Es una actividad laboral que se lleva a cabo al margen de la economía oficial. Forma parte de la economía sumergida, que en España, según los últimos cálculos de Hacienda, alcanza la cifra del 23% del PIB, es decir, unos 240.000 millones de euros, lo que supone una pérdida de recaudación de 90.000 millones.
Pero no hay que olvidar que gracias a esa economía sumergida, mucha gente trabaja y consume, pagando el IVA cuando realiza sus compras. Pudiera ser que en el fondo, la economía sumergida sea la economía del futuro. Ni impuestos IRPF ni impuestos de sociedades. Sólo impuestos IVA y el que más consume, más paga.
3 comentarios :
Menuda castaña, manda narices que haya que costear cientos de oficinas del INEM y luego la gente tenga que buscar trabajo en las farolas.
Pues encima que es donde mucha gente encuentra trabajo, algunos ayuntamientos andan prohibiendo pegar esos anuncios en las farolas.
ya te digo, si no hay otra forma de encontrar trabajo, ¿vamos a pasar hambre? Si da mala imagen, peor la da el paro. ¿Quieren unas farolas muy bonitas y la gente sin tener de qué vivir? Se nota que a los políticos, los ciudadanos les importamos una mierda.
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