Hay publicidad considerada dudosa pero que es eficiente, al menos para dar a conocer el producto y que se hable de él. Generalmente no es publicidad hecha con ese objetivo, aunque sea atrevida en algunos casos, pero intentando ser innovadora, resulta ser contestada desde algún sector social que al final obliga a retirarla. Es el caso por ejemplo de ésta foto de un anuncio de Donettes que llevaba la leyenda de “a pedir, al metro”. Sin duda quería indicar que son tan buenos que la gente te iba a pedir alguno y ya te daba la frase a emplear para negarte. Realmente es una frase coloquial que muchos emplean habitualmente pero una reacción de usuarios en Twitter diciendo era de mal gusto usar ese lenguaje cuando estamos en crisis y mucha gente pide en las calles, obligó a la empresa a pedir disculpas y retirar la publicidad.
Hay que tener en cuenta que ésta marca siempre ha usado ese tono en sus anuncios, recalcando el rechazo del que tiene Donettes a dárselos a alguien. Aunque siempre éste tipo de publicidad ha tenido detractores, nunca se vieron obligados a retirarlos como en el caso anterior con lo de pedir al metro.
La publicidad de la lencería Hope, representada por la modelo brasileña Gisele Bundchen también fue objeto de controversia. Eran videos donde ella, para darle malas noticias al marido, como que había estrellado el coche, usaba la seducción de contárselo en ropa interior. En una escena anterior, ella iba vestida normalmente para darle la noticia, lo que no era considerado adecuado, era mejor recurrir a ir en bragas y sujetador de esa marca, Un organismo oficial de Brasil que vela por la igualdad de la mujer consideró que ello atentaba contra la dignidad de la mujer y solicitó a la empresa que quitase el anuncio. La empresa, naturalmente, alegó que ella se dedicaba a eso, a hacer a la mujer más provocativa y sin duda con el fin principal de encandilar a los hombres.
Este anuncio también fue tachado de racista y al final retirado. Se trataba de la promoción de una PlayStation cuya carcasa era de color blanco, en contraposición a todas las anteriores que habían tenido color negro. Pero para muchos, se interpretaba como una superioridad en la foto de una mujer blanca sobre una negra por lo que cabía considerarlo racismo. En mi opinión y a éstas alturas, mientras se siga hilando tan fino que se ve racismo en todo, se sigue alimentando la xenofobia sin querer. Sin embargo muchos que enseguida ven racismo en montones de sitios, ni se inmutan cuando los partidos nacionalistas largan sus soflamas que se basan precisamente en eso, en la xenofobia, aunque se basen en diferencias lingüísticas o de territorio de nacimiento, cuando no pueden recurrir a la etnia o raza por no haber diferencias de piel.
Sobre éste caso ni me atrevo a opinar, porque todo ello lo encuentro extraño. La mujer de la escena aparece con el ojo morado, como si hubiera recibido un puñetazo. No encuentro mucho enlace con el promocionar productos para la belleza del cabello.
No sé exactamente que anunciaban aquí, pero sí es cierto que la foto puede ser malinterpretada si se mira con cierta maledicencia.
Lo mismo que al anterior le pasaría a éste otro anuncio publicitario.
Y ya que hablamos de publicidad, para publicidad directa la que ha sufrido éste vehículo. Le ha caído encima el anuncio literalmente. Supongo que el pastel no sería tan pesado de comer como el del anuncio al desplomarse.
Y para publicidad directa, la de ésta foto. Le dejan directamente un trozo de pizza en el limpiaparabrisas del coche para que pueda tocarla, olerla y comerla, si no se ha manchado demasiado.
Y esto no es propiamente publicidad pero sí es un anuncio informativo y taxativo.
MIENTRASTANTO
Cubos en cabeza y autoestima
Violaciones y vestidos: marchas de guarras
Mea en un pantano y sugestión colectiva
Pensamientos eróticos: mujeres y hombres
Dudaísmo: filosofía de la duda
Esclavas sexuales: propuesta musulmana
5 comentarios :
Joder, para cuando llego al final ya no me acuerdo de como empezó y tengo que volver arriba.
Si es que te dispersas mucho, hombre.
A ver, sobre el anuncio de DONNETES, es que ahora los perroflautas están subvencionados.
La Gisele Bundchen, pues mira, chico, si tú vas salido como chucho en celo, es normal que la veas estupenda, pero a mí me parece una tabla de planchar.
No tiene tetas, no tiene cintura, está recta.
Me da que a los tíos os pone más la lencería que la percha, ¡juas juas!
Sobre el anuncio de la Play Station blanca sobre la negra, una gilipollez como la copa de un pino. Si es que pelín más tontos y no nacen.
El centro de belleza de Canadá sí que parece no dejar lugar a dudas con la actitud de ambos modelos.
Ella con el ojo morado y cara triste, Él detrás, duro, y con un collar de gemas, eso que suelen regalar los maltratadores después de una paliza.
Convengo contigo en que no veo la asociación con el producto publicitado.
Sí, lo del chino se puede malinterpretar y no se ve qué narices anuncia.
¡Hombre!, el del abeto en casa anuncia slips, está clarísimo.
El padre que se levanta al oír ruído y ve al hijo dejándo un regalo para él.
Y ya me he cansado, que eres la pera pegando tonterís, ¡gandul!
Escribe, coño, que sé que lo puedes hacer de maravilla.
Los publicitarios no saben que inventar.
Hoy día existen dos maneras de hacer publicidad low cost: el marketing viral, y el tener amiguetes entre los editores de los telediarios.
En ambos casos, el coste por impacto es ridículo.
Una blanca no puede estar en un nivel superior a una negra, pero si hubiese sido al revés no hubiese ocurrido nada. Eso es reconocer que, en realidad, las blancas son superiores y por tanto pueden permitirse el level inferiorrrr...
Bueno, en fin, es que a estas horas..
La publicidad es engañosa, casi siempre, aún y, legalmente, no estar permitido hacerlo en esa forma. Las costumbres matan y el de la publicidad ha conseguido que nos creamos nada de lo que cuentan.
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