En forma de chistes de borrachos, veamos algunos motivos para beber que impulsan a muchas personas a darle al frasco. Por un lado está la búsqueda de vitaminas. La verdad, deberían buscar bebidas que contengan de verdad vitaminas, pero ellos están convencidos de que las bebidas espirituosas también son una fuente para vitaminarse. Aunque estiman que esas bebidas alcohólicas tienen poco contenido vitamínico y por ello han de ingerir grandes lingotazos, incluso hasta que les haga gatear. Otro motivo como veremos a continuación es el egocentrismo.
Parece existir una relación entre los borrachos y el egocentrismo. Los egocéntricos gustan sentirse el centro del mundo. Sucede que a medida que bebes más y más, el mundo empieza a girar a su alrededor. Así que beben más y más gira todo en torno a ellos. Siguen empinando el codo y más se sienten el centro del universo. Si te sucede alguna vez y ya no puedes ver girar todo sin caerte, entonces búscate un buen sillón:
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