Cocinera erótica y hombre lavaplatos | Sobaco Global


No te creas todo lo que piensas. Cuanto más tonto es uno, más listo se cree.
NO CONFÍES
DEMASIADO
EN TU
IGNORANCIA

Cocinera erótica y hombre lavaplatos

cocinera-erotica
Veamos un par de vídeos cortos virales sobre cómo una cocinera erótica puede convertir a un hombre en una máquina lavaplatos. Para empezar ha de ser una chica sexy de la cocina: hay que estar ligera de ropa y probando los guisos de forma insinuante.

No vale estar en pelota picada, porque sería poco higiénico y hasta peligroso. El delantal es pieza fundamental. Evita que algún vello púbico del potorro acabe en la sopa o que salpicaduras de fritanga quemen la delicada piel de la artista. Y hay que hacer trabajar la imaginación masculina. 

El delantal es una prenda excitante de primera magnitud si va sobre piel desnuda. Y hay que tener en cuenta que mantener al varón excitado es fundamental si se quiere que después se ponga  a lavar platos. 

No hay que complicarse la vida si lo que se quiere es estimular a un hombre. Las recetas más sencillas elaboradas con la técnica de la cocinera erótica le sabrán a suculentas comidas de restaurantes de cinco estrellas Michelin. 

La forma de moverse entre los cacharros con erotismo es lo fundamental. Por ejemplo, en la siguiente foto vemos como una pizza congelada es metida en el horno por una de estas guisadoras afrodisíacas, una maciza de muy buen ver que hará que esa pizza parezca hecha con pasta fresca e ingredientes exquisitos. 

Hay que resaltar que en este caso no lleva delantal porque no hay riesgo de salpicaduras de aceite hirviendo aunque conserva las pantaletas para evitar que por ahí salgan los pelos púbicos y para no enseñar toda la mercancía, por aquello de dejar algo a la imaginación.

maciza-cocina


Sin más preámbulos, vamos ya con el vídeo corto viral de como ha de comportarse la cocinera erótica que quiere que su novio sea un lavador de platos entusiasta. Atentos que es muy breve:


El problema de cocinar es que se manchan muchos cacharros. Después se plantea el quién lava los cacharros. Por ejemplo, en la siguiente foto vemos todos los cubiertos manchados después de que la chef sexy del vídeo anterior hiciera unos huevos fritos con patatas. 

Después de la comida con su novio lo que queda es esa pila de cubiertos a limpiar y que se ven en la siguiente foto:

cocinera-lavar-platos

Pero como el novio ha recibido de postre un repaso erótico que le ha dejado de lo más satisfecho se pone a lavar platos rápidamente. Un hombre satisfecho en sus bajos instintos de devorar y fornicar se convierte en una auténtica máquina lavaplatos.

En general a los hombres no les gusta esa tarea pero si se pone a ella bien estimulado, puede ser una fiera: 




Agrégame a tus Favoritos

Compartir aumentará tu karma:




Más vistos hoy:

0 comentarios :