Referente al olor de los pedos todo el mundo está de acuerdo en una frase: prefiero los míos. Es una constatación sociológica y tiene una base científica como veremos. No importa que uno lance un gran toque de trompeta acompañado de un apestoso olor. Si es propio, se tolera bien y hasta hay quien se deleita.
El motivo científico de esa preferencia se basa en que los gases que forman la ventosidad expulsada están formados por bacterias y cada persona tiene las suyas propias que generan su propio olor.
Nuestro cerebro discrimina entre los diversos olores de nuestras pedorretas y los que son de otras personas. Y el hedor de otra persona es interpretada como algo agresivo, algo que puede hacer daño, que puede transmitir una enfermedad.
De aquí se deriva el que sea mal visto socialmente hacer sonar la bocina en lugares donde hay gente. Nadie quiere oler el pestazo de los demás mientras no tiene problema en olfatear los propios.
Expulsar ventosidades es inevitable. La media humana está en 14 expulsiones diarias. Los gases se forman durante el proceso digestivo y se forman en mayor o menor volumen según los diferentes tipos de comida. Son más hediondos cuando proceden de alimentos con contenido en azufre, tal que la carne o los huevos, por hablar de alimentos habituales. Hay casos, como beber leche siendo intolerante a la lactosa, en que la frecuencia de emisión aumenta notoriamente, incluso cada hora.
Lo natural es que cuando un pedo llama a tu puerta lo dejaras salir por el tubo de escape. La tendencia es a reprimirlo si está rodeado de gente. Generalmente se logra contener pero no es bueno para los intestinos. Si se reprimen con frecuencia pueden dar lugar a formación de hemorroides o distensión del intestino. Al final, de una forma o de otra, expulsarás tus gases o explotaría.
Otro problema en la vida social es el ruido. Si salen lentamente y controlados son silenciosos pero si salen con velocidad son ruidosos. El ruido también depende de la situación muscular de la zona. Hay quien tiene más habilidad que otros para controlar la salida de las ventosidades y que no hagan ruido.
0 comentarios :
Publicar un comentario