Veremos un breve vídeo viral sobre gente torpe abriendo botellas de champagne o de cava. La imagen animada anterior es un adelanto de lo que puede suceder cuando se abre una botella de vino espumoso sin la debida precaución.
Las imágenes tienen mucho de humor pero sirven también como advertencia de los peligros que entraña la operación de apertura si no se hace correctamente.
El champan y en general toda bebida con burbujas embotellada ha de estar frío antes de beber. Si está caliente o si se ha movido demasiado la botella antes de la apertura, la presión interna dentro del recipiente será elevada y es fácil que se produzcan cosas indeseadas.
Lo más habitual es que el corcho salga como un proyectil. Es jocoso en la mayoría de los casos pero puede golpear un ojo a alguno de los presentes y producir daños.
Lo de golpear el corcho con una espada o un cuchillo para que salte requiere mucha habilidad y experiencia. Lo que suele suceder es que la espada o cuchillo, en vez de golpear el corcho, golpea el reborde de vidrio de la botella y ésta revienta.
La forma correcta de abrir:
Una vez fría la botella, para diestros, se sujeta la botella con la mano izquierda y se inclina. Con la mano derecha se agarra el corcho con fuerza y se hace girar la botella hacia un sentido y el contrario con la mano izquierda que la está sujetando. Ese giro alternativo se repite cada vez más lentamente según va saliendo el corcho. Ojo, que a pesar de todas las precauciones puede salir el corcho como un proyectil: que no haya delante nadie enfrente.
Y ahora, vamos con el breve vídeo que contiene diferentes escenas de los desastres que se suelen producir:
Abrir botellas que no tengan corcho metido a presión es mucho más fácil pero no siempre sale bien:
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