El caso de la política que ladra es un montaje electoral en forma de breve vídeo hecho por Donald Trump, el candidato presidencial de EE.UU.
Realizado en marzo de 2016 tiene como protagonista a la candidata del bando demócrata Hillary Clinton, la famosa esposa del que fue el presidente involucrado en el escándalo de la becaria de la Casa Blanca con la que tenía encuentros sexuales.
Lo que hace Trump es difundir un vídeo donde aparecen al principio dos amenazas para los norteamericanos: la chulería de Putin, el presidente ruso y los yihadistas. Ante esas amenazas, se ve que Hillary se dedica a ladrar como una perrita faldera.
Trump es un personaje que gusta de escandalizar. Se jacta de no practicar la correción política. Tiene mucho dinero y puede costearse su campaña electoral. Prácticamente no tiene que dar explicaciones a nadie.
Una sus últimas excentricidades hasta la fecha actual es el anuncio que ha publicado donde compara la belleza de su esposa con la de otro candidato, Ted Cruz.
El propio Trump subió a las redes sociales el anuncio comparativo entre ambas féminas, como se aprecia en el tuit anterior.
Parece querer decir que si los norteamericanos le votan a él, tendrán de primera dama a una bella mujer. La mujer de Trump es una antigua modelo y veinticuatro años más joven que él.
Desde luego no parece una campaña acertada ya que la mayoría de las mujeres no son bellezas como su esposa y es más fácil que se identifiquen con la "fea", que en realidad es una mujer madura pero de buen ver aunque Trump ha colocado una foto donde sale con cara de mala leche.
Vamos ahora a ver el breve vídeo que ya se ha convertido en viral. Al margen de la opinión política que se tenga sobre el tema y que pueda o no servir para captar votos, la escena tiene su cierta gracia: frente a la chulería de Putin y la amenaza islamista, los ladridos de perrita de la candidata:
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