Muy asociado a los politicos están la soberbia y la estupidez. En noticia anterior hablabamos de como los estúpidos se volvían más activos en una sociedad en decadencia ante la mayor pasividad de la gente más sensata y razonable, de acuerdo con las teorías de Cipolla. Hoy nos preguntamos a que se debe que se dén frecuentemente síntomas de soberbia y estupidez en tantos políticos. Y la respuesta la encontramos en unas declaraciones del psiquiatra Manuel Franco, recogidas en el blog de Perspectiva Ciudadana. El doctor explica que una persona más o menos normal se mete en política y de repente alcanza el poder o un cargo importante.
Tras un tiempo en el poder llega a sospechar de todo el que le haga una mínima crítica y a, progresivamente, aislarse más de la sociedad. El hecho de que este síndrome sea tan común en política se debe, según este experto, a que en otros ámbitos es más frecuente que el que esté arriba sea el más capaz, pero en política no es así, porque los ascensos van más ligados a fidelidades.
El poder no está en manos del más capaz, pero quien lo ostenta cree que sí y empieza a comportarse de forma narcisista. Como reconoce el doctor Franco, es difícil tratar éste transtorno, sobre todo porque quien lo padece no tiene conciencia de ello. Del mismo modo que el estúpido no tiene conciencia de ser estúpido, como diría Cipolla.
1 comentarios :
La corruptocracia, de la que por cierto hablan en éste blog, es la que hace que los partidos hagan una selección de personal pero al revés. Los más memos son los que suelen llegar arriba. La gente normal es incapaz de someterse a tal dictadura mental y corrupción.
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