Los necios y los nacionalistas son infatigables. Por algo decía Maurice Ravel que “la ciencia es internacional, el arte es nacional y la necedad, nacionalista”. Un buen ejemplo lo tenemos en Artur Mas, Presidente de la Generalitat catalana con algo más de un millón de votos, después de las elecciones catalanas de Diciembre de 2010. Entre otras sandeces, dijo Mas que los pueblos y las naciones se pueden medir en milenios y que los Estados, que son construcciones artificiales, en siglos como mucho.
Sacado de la portada impresa de El Mundo del 28-DIC-2010.
Aparte de ser un razonamiento estúpido, lo cierto es que estamos en Europa intentando construir la UE, que es una asociación de Estados democráticos. Ya no somos naciones donde imperan una raza, un religión y una lengua. Somos Estados democráticos donde lo que debe imperar es la Ley y la separación efectiva de poderes.
Las tribus superaron a las mutas de caza, las naciones a la tribus, y los estados, a las naciones. El nacionalismo es un invento del romanticismo del siglo XIX que sólo trajo desgracias y guerras entre países. El nacionalismo es antidemocrático, porque antepone supuestos derechos de territorios o lenguas a los derechos del individuo.
El nacionalismo en algunas regiones de España, ha derivado en un pseudo-nacionalismo o regionalismo en otras, por contagio. Ha producido una fragmentación de mercados y ha consolidado el caciquismo y la corrupción. Al final, son los ciudadanos de a pie los paganini de tanto desvarío, con un país lleno de parados, de economía sumergida y al borde de la quiebra a finales de 2010.
España necesita políticos competentes, con conocimientos tecnológicos y economicos y no bocazas y vendepeines.
Y ante la visión de un país que tolera en su seno la perversa ideología nacionalista, mientras se consolida el caciquismo y la corrupción, surge la habitual pregunta:
2 comentarios :
Decirle a ese bellotero que Cataluña no ha sido jamás una nación es como hablar con los avestruces. Cataluña perteneció a la corona de Aragón, igual que Valencia, y hace falta mucha droga dura para afirmar lo contrario.
Pero además, si tan nacionalista es, que ni se acerque al parlamento ESPAÑOL, aquí no pinta nada, ni Mas ni su millón de votos.
Candela, tu hablas de hechos históricos, de que Cataluña no fue nunca un Reino. Porque entonces no había naciones ni estados, sólo reinos y subditos. Pero Mas habla al margen de la historia, habla de nación en el sentido esotérico que le dan los nacionalistas.
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