La vida tiene mucho de carrera de ratas. Y la carrera política cada vez debe entenderse más desde el punto de vista de tal filosofía. Y que conste que tengo más simpatía a esos simpáticos roedores que tienen la desgracia de vivir en malas condiciones y transmitir enfermedades involuntariamente que a los políticos corruptos, incompetentes y caciques que cada vez abundan más en los partidos políticos.
0 comentarios :
Publicar un comentario