William E., el 25 de Octubre de 2016, en Orlando (Florida), estaba tomando copas en un club de esos donde unas mujeres bailan mientras se van desnudando. A las dos de la madrugada nuestro hombre estaba totalmente cocido. Dijo que se iba a casa en su coche y los porteros del local le dijeron que no estaba en condiciones ya que iba haciendo eses al caminar.
Pero William no hizo caso y dando traspiés llegó a su furgoneta. Se subió, arrancó y cuando iniciaba la marcha se abrió la puerta que no había cerrado bien, y el hombre se cayó al suelo. Las ruedas traseras del vehículo pasaron por encima de William. La foto del comienzo de este artículo muestra el momento del suceso.
La furgoneta siguió avanzando sola y se estrelló contra una casa que estaba enfrente y acabó por herir levemente a una señora que vivía allí.
Casi milagrosamente nuestro hombre no sufrió heridas serias así que logró subirse de nuevo a su furgoneta y se largó.
Cuando llegó la policía, atendieron a la señora herida y se pusieron a buscar al borracho causante del desaguisado que había huido.
No fue difícil localizar al autor
La policía lo tuvo fácil. El estúpido borracho se había dejado el carnet de conducir sobre el mostrador del bar de copas.
Cuando la policía llegó a la casa, nuestro hombre no ofreció resistencia. Estaba en el jardín tan tranquilo:
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