EL PRIMER COCHE DE JAMES BOND

El primer coche de James Bond, un Aston Martin, usado por el actor Sean Connery en la película Godfinger y en Operación Trueno, fue vendido en subasta en Londres en Octubre de 2010 por cuatro millones de dólares. El coche cuenta con muchos de los dispositivos que se veían en esas películas: asiento eyectable, ametralladoras ocultas, capacidad de rotar las matrículas, placa antibalas, etc…

Yo siempre había creído que esos atributos eran puro atrezzo que se fingían con decorados de cartón piedra sobre un coche de serie a la hora de rodar la película. No sabía que realmente se había construído un coche que incorporaba de verdad todos esos esotéricos extras.

Como dato curioso, decir que el novelista Ian Fleming, en la novela decía que James Bond conducía un Bertley, pero para hacer la película decidieron que fuera un Aston Martin DB5 Coupé, considerado un prodigio mezcla de diseño italiano e ingenieria británica.

Una ametralladora asoma debajo de un piloto del coche.

Ello dio mucha fama a la marca Aston Martin a nivel mundial, en 1964, cuando se proyectó Goldfinger, aunque sus coches eran muy elitistas, hechos a mano y caros. La versión de venta al público de éste modelo de coche se lanzó en 1963, y alcanzaba una velocidad de 230 km/hora.

De las ruedas traseras salen éste artilugio como defensa contra coches que se aproximen demasiado.

El coche subastado en Londres es uno de los Aston Martin que la fabrica modificó para rodar las primeras películas de James Bond. El otro, fue robado en 1997 y no se recuperó. Muchos estiman que haya sido destruído.

Una placa antibalas sale para proteger al conductor de disparos traseros.

El coche era propiedad de Jerry Lee, periodista norteamericano, que lo había comprado en 1969 por doce mil dólares y se lo había quedado hasta ahora. Dice que el dinero procedente de la venta, irá a su fundación Jerry Lee, creada para fomentar la educación contra la criminalidad.

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