Un ataque de un perro de presa suelto en la Playa de San Juan de Alicante es el que sufrió Ernst, un alemán residente en la zona y muy conocido como Ernesto entre los paseantes habituales del pasero marítimo de esa zona. El ataque fue el viernes 4 de Febrero de 2011, sobre las dos de la tarde. Una persona más bien joven dejaba que corriera suelto por la playa un perro de presa. El alemán Ernst iba con su perrito Misha cuando el perro de presa se les echó encima.
Ernst o Ernesto, intentó defender a su perrito Misha de las mordeduras del otro perro y resultó también lesionado. Cuando por fin el dueño del perro de presa pudo dominarlo, le dijo a Ernst que se responsabilizaba de lo sucedido y que iba a dejar al perro agresor en el coche, que esperase un momento. Total que se fue al coche, arrancó y salió pitando.
Ernesto, que estaba aún bajo el shock de lo sucedido, con sangre de su perro y de él mismo, cree que era un coche de marca Seat Ibiza de color amarillo y memorizó la matrícula al ver que se largaba. Después de llevar a su perrito Misha a una clínica veterinaria donde le operaron a vida o muerte y de acudir a un hospital para curarse él también las heridas, fue a denunciarlo al Cuartel de la Guardia Civil de El Campello.
Misha, el perro de Ernesto, con una de las mordeduras en el bajo vientre que le dejó los intestinos fuera. Ahora, operado y cosido, quince días después, parecen cicatrizar bien las heridas.
Otra de las mordeduras que sufrió en la parte trasera superior Misha. Ahora arrastra la pata izquierda más que andar con ella.
Ernesto muestra algunas de las lesiones que sufrió en una pierna debido al ataque del perro de presa.
El alemán Ernesto con su perrito Misha, relatando los hechos quince días después de sucedidos, a un colaborador de este blog.
Esperemos que Misha se recupere de las heridas y no le queden muchas secuelas del feroz ataque. Aunque de momento más bien arrastra la pata izquierda. Y a ver si la Guardia Civil logra dar con el desaprensivo que dejó su perrazo suelto y después se dió a la fuga. Misha se salvó por los pelos y porque afortunadamente pudo ser operado a tiempo en una clínica veterinaria.
Según nos cuenta el colaborador que nos envía la noticia, es relativamente frecuente en la zona que algunos desaprensivos lleven perros grandes o de presa sueltos para que corran por la playa, a pesar de estar prohibido que los perros, sean los que sean, anden en la arena. Y a pesar de que la Ley exige que los perros de presa lleven correa y bozal. Pero por lo visto, es rarísimo que se observen actuaciones policiales en la zona a éste respecto.
Esta es más o menos la zona de la Playa de San Juan donde se produjo el ataque del perro de presa. Ernesto llamó a la policía pero la patrulla que acudió después del suceso le dijo que la zona del ataque caía ya dentro de la jurisdicción de la Guardia Civil del Campello y que ellos tenían jurisdicción sobre la zona de playa que pertenecía a Alicante. Por lo visto eran unos metros lo que les separaba de la línea divisoria, por lo que tuvo que acudir a la Comandancia de la Guardia Civil de El Campello para denunciar lo sucedido.
LA PREGUNTA
Lo cierto es que está harto uno de ir por la calle en cualquier sitio y ver gente con perros sueltos, bien sean perros grandes o de presa. Por no hablar de que raramente los de presa llevan bozal como marca la ley. No parece que las autoridades se tomen el tema muy en serio aunque cada poco surgen noticias de ataques de perros sueltos, a veces con consecuencias graves. No es extraño que el ciudadano que suele pasear por la calle y ha de bregar con estas situaciones continuamente se haga la pregunta:
1 comentarios :
He estado en esa Playa de San Juan en Abril de 2014 y me parece que sigue sin vigilancia porque si de día ya se ven algunos perros sin cadena en el atardecer anochecer hay montones que los dueños se ve que llevan a pasear sueltos.
He visto de todas las razas, pero algunos son grandes y hasta de tipo peligroso. Los comodones de los dueños no los conducen atados y los animales corren por el paseo o entran en la playa para mear y defecar y allí se queda en la arena el regalo.
Es lástima que playa tan bonita no tenga mayor vigilancia de tales cosas para no dar impresión al turista de que allí vale todo. Hay un paseo que se llama Paseo de Niza. Ja, ja. En Niza no permiten ese descontrol perruno ni de coña.
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