En China ha proliferado un curioso truco para evitar las multas de tráfico. Es ilegal, desde luego. Pero es sencillo aunque canallesco ya que le endosan la sanción a otro.
Sirve para los casos en que te toman una foto por vulnerar el límite de velocidad o saltarte un semáforo.
Venden unas placas magnéticas con números que son similares al color de la matrícula. El defraudador sale con su coche y antes coloca una o dos chapas de esas sobre los números reales.
En la foto anterior vemos como un policía que ha detenido a un vehículo se ha dado cuenta y levanta una de esas chapas. Es un número "6" que está encima de un "3". El número "6" es uno de los más empleados ya que también sirve como "9" dándole la vuelta. Veamos como el policía lo ha quitado:
La multa le hubiera ido al propietario del C9600 o C9900. El hombre falsamente multado hubiera tenido que emprender una dura lucha para demostrar que él no estaba en ese lugar el día del castigo. Y es bastante arduo conseguir demostrarlo cuando una foto te acusa.
El sistema es más sencillo que el más radical de llevar una chapa falsa con otro número completo diferente. En caso de que el conductor pillo se de cuenta de que hay un control de tráfico puede con rapidez quitar y esconder la placa magnética con el número. No es tan fácil con una chapa completa falsa. Aunque en el caso que nos ocupa al astuto conductor no le dio tiempo para escaquearse. Le pescaron in fraganti.
Mientras tanto:
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