El curioso caso de la mujer pechugona acosada en la televisión en directo provocó una fuerte polémica en Francia en Octubre de 2016.
Ella es un joven con curvas llamada Soraya Riffy. Es bailarina y busca ser famosa. Ha manifestado que no le importaría ser la Kim Kardashian francesa.
El presentador, en cuanto la tuvo al lado, dijo que quería darle un beso. Pero ella giró la cabeza diciendo que no. Es el momento que muestra la imagen anterior.
Pero el tío ya estaba lanzado impresionado por el tetamen que la maciza le ponía delante del morro y sin dudarlo se lanzó a besar ese gran busto. Y lo besó.
Ahí empezó el problema. Fue acusado por parte de la opinión pública y publicada de acosador.
Las asociaciones feministas presionaron para que la maciza presentara una denuncia alegando que "no es no".
Pero Soraya dijo que no denunciaría. Que comprendía que el presentador se hubiera dejado llevar por sus estímulos masculinos.
La verdad es que el tetamen de la maciza es producto del bisturí. Le han implantado mamas artificiales. Es como si dentro le hubieran puesto dos melones. Y en realidad lo que el presentador besaba era eso, dos melones artificiales.
Pero la sugestión es la sugestión y el impulso que experimentó el presentador ante ese volumen fue instintivo sin darle tiempo a pensar sobre lo que besaba.
A continuación unas fotos de lo sucedido:
El presentador ojea a la pechugona
Después de que ella se negara a un beso, el presentador se lanzó en picado a besar los melones
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