Observando el gráfico adjunto, se puede ver la exposición de la Banca alemana, francesa, suiza y británica a la economía de los llamados PIGS (Portugal, Irlanda, Grecia y España), o sea, los préstamos realizados a dichos países. Destaca España (en color amarillo) así como Irlanda (en color verde). La ruina ha venido porque esa enorme cantidad de deuda, no fue invertida de forma realmente productiva, sino que fue a parar en su mayoría a pagar terrenos recalificados y sobrevalorados. Los dueños de los terrenos e intermediarios cogieron el dinero y todavía están corriendo.
Y es que cuando entramos en el Euro, los relativamente bajos tipos de interés que ofrecía el euro junto a una gran capacidad de financiación que se podía obtener en el mercado de capitales de Frankfurt, hizo que las entidades financieras españolas e irlandesas, ante la falta de suficiente ahorro interno, (el ahorro era perseguido, por ejemplo con el impuesto del Patrimonio), se lanzaran como hienas hambrientas a por préstamos.
Ese dinero conseguido de ahorradores alemanes, ingleses o franceses, vía el multiplicador bancario, permitía alimentar el enorme endeudamiento interno de empresas y familias en España, empeñadas en el noble esfuerzo de sostener la imparable subida del precio del metro cuadrado del zulo, del acosado o del chalete. Ahora lo que queda es la deuda exterior neta, esa de color amarillo, del orden de los 860.000 millones de euros, que hay que pagar. Qué hacían Solbes y el Banco de España mientras veían como aumentaba el endeudamiento de forma gigantesca para ir todo al sector inmobiliario mientras muchas familias se endeudaban de por vida y en base al peligroso interés variable, es algo que deberían responder ellos.
Y es que cuando entramos en el Euro, los relativamente bajos tipos de interés que ofrecía el euro junto a una gran capacidad de financiación que se podía obtener en el mercado de capitales de Frankfurt, hizo que las entidades financieras españolas e irlandesas, ante la falta de suficiente ahorro interno, (el ahorro era perseguido, por ejemplo con el impuesto del Patrimonio), se lanzaran como hienas hambrientas a por préstamos.
Ese dinero conseguido de ahorradores alemanes, ingleses o franceses, vía el multiplicador bancario, permitía alimentar el enorme endeudamiento interno de empresas y familias en España, empeñadas en el noble esfuerzo de sostener la imparable subida del precio del metro cuadrado del zulo, del acosado o del chalete. Ahora lo que queda es la deuda exterior neta, esa de color amarillo, del orden de los 860.000 millones de euros, que hay que pagar. Qué hacían Solbes y el Banco de España mientras veían como aumentaba el endeudamiento de forma gigantesca para ir todo al sector inmobiliario mientras muchas familias se endeudaban de por vida y en base al peligroso interés variable, es algo que deberían responder ellos.
3 comentarios :
La creptocracia, el gobierno de los ladrones. Aunque estos son mas que ladrones, son autenticos criminales.
Gracias por lo de la plantilla, pero de momento para mi blog voy a cultivar el minimalismo, y en el Circulo si alguien se apunta con ganas...
Al final volvemos aL punto de partida de una UE cogida con alfileres en base a grandes principios y cimientos poco sólidos.
es imposible un euro, una moneda única fuerte y asentada sin que exista unA política económica y fiscal común a todos los paises miembros, que sea fiscalizada por Bruselas y el BCE y que impida que se desmadre el déficit y la emisión de deuda pública como ha ocurrido con los PIGS.
Vaya, por un momento pensé que el gráfico representaba el resultado del pasado festival de Eurovisión, con Alemania a la cabeza. Pero no, ¿tanta pasta les debemos a los teutones?. Pues ya pueden ir pidiendo día y hora en FOGASA.
Besossss, Bucanero.
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