El peligro de aparcar mal el coche no radica sólo en que te puedan multar o te lo pueda llevar la grúa municipal. Lo peor es que alguien que se considera perjudicado por el estacionamiento del vehículo se tome la justicia por su mano. Por eso siempre es aconsejable procurar aparcar lo más correctamente posible, sobre todo evitando importunar a alguien.
Hay dos situaciones muy arriesgadas para la seguridad de tu vehículo: cuando este impide el paso a otros o cuando en un aparcamiento público ocupas dos plazas con tu coche al dejarlo entre dos rayas, por ejemplo. Lo que estás haciendo es ocupar dos espacios. Es el caso de la primera imagen de este artículo y al final veremos un breve gif animado de un caso sobre el tema donde un conductor justiciero resuelve el problema de modo tajante.
Pondré algunas fotos de casos de coches que han sufrido agresiones por parte de conductores o vecinos cabreados por estar aparcado entorpeciendo el paso. Una de las venganzas típica suele ser la de un bote de pintura derramada sobre la carrocería. Según sea el tipo de pintura, la lesión puede ser seria ya que puede obligar a tener que pintar todo el vehículo de nuevo.
Otro procedimiento justiciero es que varios se juntan para mover tochos de cemento de los que se encuentran a veces en la calle cuando hay obras y usarlos para encajonar el coche mal aparcado de modo que no pueda andar ni hacia adelante ni hacia atrás.
Las venganzas pueden ser aún peor. Un pedrusco o un tocho de cemento de obra puede acabar sobre la chapa del vehículo. O un martillo o un hacha puede hacer de las suyas rompiendo cristales y chapa. También puede suceder que algunos decidan despejar el camino tumbando de costado al coche que interrumpe el paso.
Aún puede ser peor. El vehículo puede ser presa de la ira de algún vecino que decide directamente cargarse el vehículo. O sea, siniestro total:
Ahora veamos en un gif animado el caso de un coche aparcado en un parking cubierto y que ocupa dos plazas. Llega otro vehículo que intenta aparcar a su vez pero no tiene espacio ya que parte de la plaza libre está pillada por el mal colocado. La solución es de lo más expeditiva. Con un topetazo hace sitio. Fijaros que coloca al mal situado en su sitio pero a fondo. Lo desplaza y lo incrusta contra la pared lateral:
Así que un consejo, antes de dejar el coche en cualquier lado, por cómodo que te resulte, piénsalo bien. Cualquier vehículo dejado en la calle o en un parking siempre está expuesto a la acción de algún gamberro que pase por allí y decida hacer una perrería pero si encima está estorbando, el peligro de que le suceda algún percance aumenta sus probabilidades notoriamente.
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