Veamos unos ejemplos de ligar cutre en plan salvaje y otro método
más sutil de hacerlo con la carta con truco. En la imagen anterior se aprecia
de que van los tiros en lo de intentar triunfar a lo borde. El ligón expresa de
forma grosera todo el deseo que ella despierta en él.
Lo hace de una forma bastorra pero sincera. No compara a la
pretendida con la belleza de una noche de luna ni con las perlas del mar ni ninguna otra cursilería. De hecho, odia lo cursi. Y es sincero porque es más fácil decirle a una mujer que es atractiva como una amapola o algo similar que manifestar la admiración de una forma tan directa y primitiva.
Pudiera parecer que las damas que reciban tales halagos se
sentirán molestas y hasta asqueadas, pero algunos logran ligar así, con mujeres
que valoran esa sinceridad directa que surge de lo profundo del macho cabrío
que las desea.
Muchas mujeres se mostrarán ofendidas con esas entradas a lo
bestia pero al fin y al cabo, si se han maquillado, se han vestido destacando
sus encantos y están de buen ver, esos piropos a lo bestia son en el fondo un
bramido de admiración.
No estoy pretendiendo alentar al estilo de ligar cutre que puede ser considerado una grosería machista por muchas, sólo muestro que existe. Hay tíos que lo dicen bramando pero otros lo sueltan con gracia y tiene éxito con algunas damas.
¿Porqué hay ligones cutres?
Muchos se preguntarán que porqué hay gente tan basta a la hora del ligoteo. Son dos motivos fundamentales. Uno es que hay tipos que son más bien brutos y bastorros y esas expresiones le salen de adentro de modo natural. Otro motivo es que hay tipos que sólo les interesa triunfar con mujeres que responden a ese tipo de piropeo. No les interesa contactar con hembras más finólis.
Un estilo más fino
Dentro del ligoteo chabacano puede darse un estilo más sutil, más poético. Veamos algunos ejemplos:
¿Porqué hay ligones cutres?
Muchos se preguntarán que porqué hay gente tan basta a la hora del ligoteo. Son dos motivos fundamentales. Uno es que hay tipos que son más bien brutos y bastorros y esas expresiones le salen de adentro de modo natural. Otro motivo es que hay tipos que sólo les interesa triunfar con mujeres que responden a ese tipo de piropeo. No les interesa contactar con hembras más finólis.
Un estilo más fino
Dentro del ligoteo chabacano puede darse un estilo más sutil, más poético. Veamos algunos ejemplos:
Naturalmente, las frases más o menos atrevidas o groseras, han de ir acompañadas de adecuados gestos insinuantes con la cara para que surtan más efecto:
¿Y ellas?
Lo cierto es que ya comienzan a abundar mujeres que también se vuelven activas a la hora de piropear en plan directo y salvaje. Quizás no tanto como ellos, pero se van aproximando. Estamos hablando de la mujer en general porque las que se dedican a vender sus favores profesionalmente pueden sonrojar a más de uno:
Carta con mensaje oculto
Otra manera más sutil es la que surgió ya hace mucho tiempo, cuando las restricciones públicas a los galanteos eran grandes. Los pretendientes enviaban cartas donde entre líneas dejaban ver sus intenciones a sus amadas.
Otra manera más sutil es la que surgió ya hace mucho tiempo, cuando las restricciones públicas a los galanteos eran grandes. Los pretendientes enviaban cartas donde entre líneas dejaban ver sus intenciones a sus amadas.
El padre o el marido que podía interceptar una de esas notas
vería a un admirador de su esposa o de su hija pero sin intenciones lascivas. Un
poeta al que la belleza femenina inspiraba bellas palabras. Pero ellas,
conocedoras de la clave, podían leer el verdadero mensaje que recibían. Allí en
lo oculto reposaba la verdadera pasión de su pretendiente.
Mientras tanto:
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