El mensaje decía: "Todos los oficiales y el capitán están muertos en el puente de mando. Posiblemente el resto de la dotación está también muera....(pausa)... Yo muero".
Un buque norteamericano, el Silver Star, escuchó el aviso y se acercó para ver lo que sucedía. Un equipo de hombres del Silver subió a bordo del Ourang y nadie salió a recibirles. No había señales de vida.
Encontraron a toda la dotación muerta tal como decía el mensaje. Sacaron alguna foto como las que pondré a continuación. La expresión de los fallecidos la describieron los tripulantes del Silver Star como de terror y con los brazos extendidos como si intentaran agarrar algo.
El telegrafista que emitió el último mensaje estaba muerto, caído sobre la mesa y con la mano al lado del pulsador morse del telégrafo. Una extraña mueca en su rostro hacía que se vieran los dientes.
El telegrafista que emitió el último mensaje estaba muerto, caído sobre la mesa y con la mano al lado del pulsador morse del telégrafo. Una extraña mueca en su rostro hacía que se vieran los dientes.
El Silver Star decidió dar remolque al Ourang Medan que estaba al garete en pleno mar. Cuando lo estaba remolcando hacia un puerto se declaró un incendio en el buque remolcado que acabó devorando todo y finalmente explotó y se hundió.
Nunca se pudo averiguar que podría haber pasado para que toda la dotación del buque mercante falleciera sin presentar daños físicos visibles. Al irse todo al fondo del mar no fue posible realizar una investigación cuidadosa que permitiera llegar a alguna conclusión. ¿Qué pudo suceder?. Veamos.
Posibles explicaciones del suceso:
Posibles explicaciones del suceso:
¿Un envenenamiento del personal a bordo por algún alimento o alguna bebida?. ¿Una enfermedad contagiosa mortal?. Por el tono del mensaje no parece que hubiera alguna incursión de piratas y no parecían muertes violentas. El que lanzó el último mensaje del misterioso buque debía sentirse muy débil y a punto de morir. Ni siquiera estaba seguro de que toda la dotación estuviera muerta aunque lo estimaba como más probable.
Es raro que no se transmitiera ningún mensaje de auxilio antes de que lo hiciera el último tripulante cuando ya se sentía fallecer. Bien es verdad que pudo haber transmitido antes algún otro aviso y que no fuera escuchado por otro navío pero es raro ya que ese Estrecho de Malaca suele tener tráfico continuo.
Un periódico holandés publicó posteriormente una historia que parece posible pero sin confirmar. Decía que en las Islas Marshall había aparecido un superviviente de ese barco, un alemán, que dijo que en la bodega transportaban acido sulfúrico y que desprendió gases que mataron a toda la dotación. El periodista apuntaba que ese alemán había fallecido posteriormente.
Una foto de uno de los tripulantes fallecidos del barco mercante misterioso. Es una postura extraña. Los marinos del Silver Star que sacaron la foto no apreciaron daños físicos tal que heridas o golpes.
A raíz de esa noticia algo dudosa se ha especulado con que el buque holandés estuviera transportando alguna sustancia química de forma ilegal. Se barajó incluso que pudiera llevar nitroglicerina o algún explosivo sobrante de la Segunda Guerra Mundial finalizada dos años antes. Algún incendio fortuito en las máquinas del buque pudo alcanzar esas sustancias químicas y provocar la explosión que destruyó a la nave. Lo extraño es la postura de los fallecidos, descritos como que tenían los brazos extendidos como queriendo cubrirse del sol. No parece una postura propia de quienes acaban asfixiados o intoxicados por gases.
La intoxicación por gases es tentadora pero es raro que en un buque de ese tamaño y en plena mar se produzcan tantos gases como para alcanzar a todas las partes del buque incluido el puente de mando que está en la parte superior y más aireado. Hay que pensar que algunos tripulantes estarían en la sala de máquinas, separada totalmente de otros compartimentos y con ventilación propia. Otros estarían en sus camarotes o en el comedor si no estaban de servicio. Otros estarían en el puente de mando atentos a la navegación. Y todos acabaron muertos en lo que parece algo casi simultáneo.
No faltan las teorías que apuntan a un ataque extraterrestre desde un OVNI o que estuvieran transportando material radiactivo.
Extrañas posturas de los cadáveres
El hecho de que algunos cadáveres estuvieran tendidos sobre cubierta con algún brazo extendido como intentando proteger la cara de los rayos solares es muy desconcertante. Porque si una persona cae muerta lo normal es que los brazos reposen en el suelo como el resto del cuerpo.
Los que vieron la escena la describen como si hubieran muerto congelados. Si un cuerpo es congelado a muy baja temperatura, o sea, rápidamente, puede quedar en cualquier postura, rígido, como un bloque helado. Pero el Estrecho de Malaca no es precisamente Siberia.
Una foto del Ourang Medan atracado en un puerto. Era un mercante de tamaño considerable. Se fue a pique llevándose con él el misterio de lo que sucedió a bordo y que acabó con toda la dotación.
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