Veamos como algunos se las
han ingeniado para ganar dinero en Internet comiendo y defecando. El caso de
comer es a lo que se apuntó la mujer de la imagen: ella emite en directo imágenes
suyas mientras devora y hay gente que paga por verlo.
Lo habitual era que una
mujer salía haciendo despelotes y vendía esas escenas a los internautas que
desearan verlo. O como el famoso teléfono erótico para escuchar y decir
guarradas pero con imágenes.
Lo sorprendente es que esa
mujer tuvo esa idea de venderse tragando comida y ha conseguido ganar dinero
con ello. Nada menos que unos nueve mil dólares mensuales se levanta mientras
se dedica a engullir.
Lo raro es que dedicándose a
zampar como negocio, no esté más rellena. Porque parece más bien tirando a
delgada. No sé cual será el truco. O limita las emisiones a las horas en que
tiene hambre, o tiene una hermana gemela o una doble que se turna con ella para
masticar.
La otra idea es más escatológica.
Se trata de ganar dinero a costa de que los internautas paguen por verte
defecando en directo. Se ve que hay gente para todo. Unos dispuestos a cagar en
directo y otros dispuestos a pagar para verlo. Cabe suponer que dado lo breve de cada puesta del cagarro, tendrán que ser varios los que intervienen. Podrían asociarse con la mujer del caso anterior y así podrían emitir el proceso completo de comer y defecar.
El caso es que hay quien va
encontrando nichos de mercado para vender por Internet aunque sea vendiéndose a
sí mismo exhibiéndose en alguna situación íntima.
Puede parecer extraño lo de los casos anteriores pero al menos no parecen ser muy perjudiciales. Porque otros se las apañan para ganar dinero a base de explotar la credibilidad de la gente más inocente o ignorante, como el predicador Lesego que tiene un rebaño de personas a las que ha convencido de lo bueno que es comer hierba.
Aquí vemos a unas de sus fieles en el proceso de pastar la verde hierba como si fuera una vaca. Con la diferencia de que los humanos apenas podemos digerir el pasto.
Otra escena de los pastadores
El proceso final suele acabar en grandes vomitonas. Quizás también podrían retransmitirlas en directo con una webcam y ganar dinero con ello.
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