El caso del asesinato de chica anunciado en Twitter sucedió
en la región de Sinaloa, en México. Una joven de 16 años, Erandy, acabó con la vida de la que había sido su
amiga, Anel Báez. Eran compañeras de estudios.
El 19 de Marzo de
2014, la presunta asesina Erandy acudió a visitar a Anel en casa de esta donde
se encontraba sola. Parece que le llevaba un regalo de helados para compartir
juntas. Anel la dejó pasar y fueron a una sala donde había un televisor. Erandy
dijo que tenía que ir al cuarto de baño pero lo que hizo fue ir a la cocina y
agenciarse un cuchillo.
Con el cuchillo fue al salón donde Anel se había quedado
viendo la televisión y la apuñaló más de sesenta veces hasta matarla. Después
eliminó lo que consideró algunos rastros que pudieran delatarla y se fue.
Durante el funeral de la fallecida, apareció allí Erandy
acompañada de su madre. La presunta asesina llevaba un vestido de mangas largas
que cubría arañazos y cortes que tenía en sus brazos, de resultas del asalto
que hizo a Anel. Permaneció en un sitio sin moverse de él y con la cabeza baja.
Hasta que unos policías irrumpieron en el lugar y discretamente la invitaron a
salir.
La policía tenía sospechas de que Erandy estuviera
involucrada después de hacer algunas investigaciones y la sometieron a
interrogatorio. Ella confesó que la había apuñalado por venganza, ya que Anel
había difundido en Internet unas fotos tomadas tiempos atrás. Dijo Erandy que
en esas fotos ella aparecía desnuda y que le había sentado muy mal. La familia
de Anel está horrorizada y dice no saber nada de dichas fotos, dudando de su
existencia o de que la asesinada hubiera difundido nada de eso por Internet.
Sea como sea, el caso es que Erandy había estado poniendo días
atrás unas frases inquietantes en Twitter. En uno dijo que “en mi mente, te he
matado ya tres veces al menos”. En otro decía que “en mi mente ya te maté
cruelmente”. Desde luego que podían entenderse de modo figurado y tampoco exponía
a quién iba dirigido, pero son frases duras y de tener en cuenta. Si Anel las
leyó, no debió relacionarlas con su persona. O quizás no las leyó.
Lo que parece es que Erandy, por el motivo que fuera, incubó un odio enorme hacia la que antes era su gran amiga Anel. O al menos, eso es lo que había creído esta, que en 2012 dedicaba grandes piropos a Erandy públicamente en Facebook, diciendo de ella que era maravillosa y casi una hermana.
Indignación popular:
Existe indignación popular al saberse que por ser menor de
edad, la presunta asesina no puede ser condenada a más de siete años en un
centro de internamiento de menores. Ha habido incluso alguna manifestación
protestando. Pero la ley es la ley y tendrán que aguantarse.
Existe el debate de que la ley establezca una mayoría de
edad tajante basándose en la edad biológica y no en la edad mental. No siempre
hay una correlación exacta. Cuando existe premeditación y borrado de huellas
para encubrir el crimen, parece más obra de una mente adulta que de una mente
juvenil.
Con ese tipo de leyes que fijan la edad penal en base a la
edad biológica puede extenderse la idea de que un menor de 18 años puede hacer
cualquier salvajada y que su castigo será ínfimo.
Fenómeno sociológico de las redes sociales:
No cabe duda de que se trata de un fenómeno sociológico muy reciente lo de las relaciones a través de las redes sociales. Y si en unos casos ha llevado al suicidio de jóvenes que se han considerado vilipendiados a acosados a través de ellas, en este ha sido la presunta asesina la que se dedicó a exteriorizar sus amenazas con sus tuits, para finalmente ejecutarlas, como parece. La pregunta que se hacen muchos es si la familia de Erandy no visitaba de vez en cuando lo que la chica ponía en Twitter y si lo hacían, si no les extrañaba que pusiera tales frases.
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