El coste del oro y su precio

El coste del oro es el de su extracción, que no es cosa fácil. Pero rara vez el coste de extracción se relaciona con su precio en el mercado. La extracción de oro es rentable en tanto en cuanto los gastos de las operaciones estén por encima de lo que se paga por el metal.  En Agosto de 2011, la onza de oro, unos 31 gramos, llegó a los mil novecientos dólares. Pero ello es debido a las incertidumbres habidas en esa época en los mercados financieros. No siempre se puede contar con precios tan elevados. El oro, actúa como valor refugio cuando la gente desconfía de los bancos y de las acciones. Pero bien pudiera formarse una burbuja en el precio de oro y de repente, producirse un bajón en su valor. En 2001, el precio de la onza era del entorno de los trescientos dólares. Una gran diferencia.

En la foto anterior, puede verse la construcción de una mina en Pueblo Viejo, en la República Dominicana, que se espera entre en producción a mediados de 2012. Es de la empresa BARRICK, la mayor empresa de la mineria del oro. En su informe anual, la empresa da datos de costes de producción donde se observa la mayor dificultad o menor en obtener el oro. Mientras la Mina de Cortez, en Nevada, USA, permite obtener oro con unos gastos de unos 210 dólares por onza, en otras minas se sobrepasan los 600 dólares/onza. O sea, minas que ahora son bastante rentables, en Agosto de 2011, con el precio del oro en máximos en los mercados, no lo hubieran sido en 2001. Algo parecido sucede con el petróleo. Dependiendo de su valor en el mercado, la extracción en ciertos pozos muy profundos puede ser rentable o no serlo.

Grandes depósitos y tuberías son necesarios para una moderna mina de oro. Aquí puede verse como se descarga un gran depósito desde un buque. Los costes de inversión para montar una mina son elevados y el tiempo de construcción de las instalaciones puede llevar meses o años. Durante siglos, el hombre ha ido extrayendo oro. El oro que se encontraba más fácil, en forma incluso de grandes pepitas de oro prácticamente puro, ya ha desaparecido de la superficie terrestre. Ahora hay que mover mucha tierra y recurrir a complejos industriales para obtener el oro.

El oro tiene un valor intrínseco en sí, además de su uso como metal que se compra y se vende en los mercados financieros en forma de lingotes. Aparte de la joyería, tiene muchas propiedades industriales y no se emplea más por ser muy caro. El oro en lingotes que se compra y se vende en los mercados financieros suele estar guardado en sotanos acorazados de grandes bancos. Y generalmente no se mueve de ahí. Si un operador A le vende oro a otro operador B, lo habitual es que el oro se desplace dentro del sótano del arcón del operador A al arcón del operador B, pero nada más, por exponerlo gráficamente. Algo similar sucedía cuando el oro era el patrón que sostenía el valor de las monedas. Cuando un país hacía un ajuste de moneda, compraba o vendía oro a otro país, el oro salía de la habitación del país en el sótano acorazado del Banco donde estaba y pasaba a la habitación donde se almacenaba oro del otro país.

En la construcción de la mina, se incluyen equipos de arqueología. Como se mueve mucha tierra, se investiga la existencia de restos antiguos de interés científico.

Vista de las instalaciones de la mina de oro de Pueblo Viejo, que se estima entre en producción a mitad de 2012.

ORIGEN DEL ORO

El asunto intrigante que muchos se preguntan es porque el oro y otros metales se pueden encontrar en la superficie terrestre. Porque cuando La Tierra se formó, era una masa incandescente y los elementos más pesados, como el hierro, el más abundante y el resto de metales, se irían hacia el fondo, al centro del planeta, a su núcleo aún incandescente. Ahí estarán millones de toneladas de oro, plata, platino, etc, pero lógicamente, imposibles de recuperar. La única explicación posible para la existencia de metales en la superficie terrestre es la que apuntan investigadores de la Bristol University, Inglaterra: hace unos cuatro mil millones de años, cuando La Tierra ya estaba formada y la superficie fría, con todos sus metales en el centro, miles de impactos de meteoritos fueron sembrando al planeta de todo tipo de materiales, entre ellos, los metales preciosos como el oro o el platino. O sea, que quizás alguien pueda encontrar en cualquier momento y en cualquier lugar un pedrusco procedente de un meteorito y que sea de oro macizo, por ejemplo. Cuando el hombre primitivo comenzó a usar el oro como decoración, se servía de estos pedruscos de oro que se encontraban. Lo golpeaban y golpeaban para hacer que se fuera extendiendo en finas láminas. Ello es posible gracias a la gran maleabilidad del oro puro. Una vez extendido en finas láminas, podían darles forma, hacer pulseras, collares, máscaras, etc…

MIENTRASTANTO

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