Un objeto volante no identificado, un OVNI, fue avistado cruzando el cielo de Brasil el 28 de diciembre de 2014. Una brillante estela era claramente visible en el cielo nocturno. En un principio se pensó que era un meteoro, pero después se pudo comprobar que había impactado contra el suelo y que no estaba desintegrado.
En la foto anterior se puede apreciar en que consiste el cacharro que vino del espacio. Es un artefacto metálico de un metro y medio de largo que no se desintegró a pesar de las altas temperaturas que alcanzó al cruzar al atmósfera terrestre. En la imagen siguiente se puede ver como el OVNI va dejando una brillante estela:
Muchos se apuntaron a la teoría que era un objeto extraterrestre que había acabado cruzándose en la ruta de nuestro planeta y se había estrellado. Pero algunos expertos han apuntado que podría tratarse de un tanque de combustible de una nave espacial terrestre, probablemente rusa.
El caso es que es una demostración del peligro que pueden suponer los artefactos espaciales sean de origen terrestre o no. Si ese objeto metálico hubiera impactado contra una ciudad en vez de hacerlo contra suelo campestre hubiera producido graves daños materiales y a las personas.
Tendrá que suceder alguna grave desgracia para que se tome conciencia del peligro que supone la basura espacial que se desploma sobre la superficie terrestre.
Aquí se ve el artilugio espacial en su parte frontal
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