Ya en 1923 se preguntaba al
periodista Paul Jordan si era una locura o un timo el arte millonario moderno,
o sea, los cuadros que empezaban a venderse por millones. Todo parece indicar
que en el arte moderno influye mucho la facultad del autor para venderse a sí
mismo. El pintor pop Warhol probablemente no habría podido vender sus cuadros a
precios millonarios si no hubiera hecho una intensa vida social en Nueva York. Cuando
Paul Jordan, que no sabía pintar, hizo un cuadro y logró que se colgara en
museos importantes haciendo creer que era una obra de un gran pintor, dejó a
muchos en evidencia.
Porque lo que hizo fue
pintar un monigote que parece una especie de indígena de isla tropical con un
platano en la mano. Paul dijo que quería haberle puesto otra cosa en la mano
pero que le salió ese plátano. Cuando descubrió la burla, muchos críticos de
arte que habían picado y elogiado el cuadro no sabían donde meterse. Alguno
alegó que el cuadro era realmente bueno y que Paul Jordan tenía talento como
pintor.
Parece increíble que un cuadro que muestra una viñeta de cómic pueda alcanzar esa cifra millonaria. Pero cuando un pintor ha entrado en el Olimpo del arte millonario, todo lo que pinte se vende por mucho dinero.
Es cierto que la expresión
artística es muy amplia y que además es muy subjetiva. Algo que a una persona
puede parecer arte a otra puede parecerle una mamarrachada. Pero da la impresión
de que algunos listos se han aprovechado de esa amplitud de miras sobre el arte
para colocar a museos o coleccionistas cuadros a precios multi millonarios. Aparte
están muchos artistas profesionalizados en obtener subvenciones.
Lo cierto es que cuando un cuadro se vende por varios millones, el precio llama más la atención que el propio cuadro en sí. Todo el mundo quiere ver el cuadro por el que se ha pagado tanto dinero. Y no olvidemos que al fin y al cabo, las cosas tienen el precio que alguien esté dispuesto a pagar por ellas.
Lo cierto es que cuando un cuadro se vende por varios millones, el precio llama más la atención que el propio cuadro en sí. Todo el mundo quiere ver el cuadro por el que se ha pagado tanto dinero. Y no olvidemos que al fin y al cabo, las cosas tienen el precio que alguien esté dispuesto a pagar por ellas.
JUEGO DE ADIVINANZAS
Ahora algunos cuadros valiosos. Algunos son ciertos y otros son mentira. puedes jugar a adivinar cual son los cuadros de arte moderno reales y los falsos.
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3 comentarios :
Nunca compres un cuadro de un artista vivo, seguro que es un estafador.
Se puede comprar un Picasso (o cualquier artista reconocido) en una subasta, y venderlo por casi el doble al año siguiente.
Es una buena inversión. Es algo único. No se puede sacar mas de la tierra, emitir o imprimir, por lo tanto su valor no se deprecia ni se diluye.
MJ
El arte es un concepto subjetivo, la idiotez también. Así que allá cada uno pero yo no hubiera pagado ni un euro por muchos cuadros que se han vendido por sumas millonarias.
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